domingo, 16 de febrero de 2014

Nos vamos para la mierda


Sentì que hoy nos fuimos a la mierda. En plena era digital, donde se supone que la gente està mucho mejor informada que NUNCA ANTES, todos estamos estupidizados con el Facebook, viendo como Marìa Inès “actualizò su estado”; como Laura subió unas fotos bacansìsimas tomadas desde arriba para que se le brote el silicón (que ahora además ya no se esconde, se promueve); como Marco pelea desde la comodidad de su casa ( y desde su iphone) por el Yasunì (aunque ni loco deja de usar el auto); como Lorena postea las fotos de la caída del Fabri donde no le etiquetò a la Micaela (por puta); como cualquier hijo de vecina puede convertirse en filòsofo… y malo; como la gente que sabes que es fea, aparece aceptable y hasta bonita; como los pendejos que ni para copiar valen, nos siguen postenando en el muro canciones del Youtube; como hay huevones que ponen “me gusta” a la clásica foto de florcitas con pensamientos trillados; como las enormes causas sociales se disuelven frente a si Shakira es o no bisexual luego de su último video. Como nos siguen distrayendo.

En pleno dìa del amor, en Quito parecía màs importante el debate entre Rodas y Barrera. Todo el mundo lo comentaba. Muchos que iban a votar por Rodas, ahora estaban indecisos… pero lo peor, muchos otros creen ahora que votar por Barrera es votar por Rafael… ¡Puta madre, si Rafael no se ha lanzado para nada! Aunque si me lo preguntan, yo quisiera votar por Rafael para alcalde de Quito… chuta, si eso hizo en las carreteras del país, no me quiero ni imaginar lo linda que quedarìa mi ciudad sin un solo hueco…

En pleno dìa del amor, los publicistas, que son (somos) una sofisticada y elegante evolución de los buitres, nos lucíamos con mensajes cursis como “… si en verdad lo amas, déjaselo saber comprándole un …” Puta, como que la gente es estúpida. ¡No seas imbécil!, si en realidad le amas, NO LE COMPRES NADA… no vaya a ser que relacione las dos cosas y en época de “vacas flacas” te vaya botando aduciendo que “dejaste de amarle”.

En pleno dìa del amor perdía su trabajo una camarera de uno de los moteles màs conocidos en Quito. El asunto es que se enfermò y pidió permiso. La jefa le dijo que solo en dos fechas, donde habían “llenos totales” no podìa faltar: en el dìa del amor y en el dìa de la secretaria, caso contrario, que vea no màs otro “camellito”.

Nos vamos para la mierda. Los guambras están convencidos de que aprenderse las de Calle 13 les hace revolucionarios. Pero lo màs triste, las masas están convenciéndose de que “todo están bien”.

Como ves, solo fue un ejercicio literario... no propongo nada esta vez.
Matías Dávila 2010, Todos los derechos reservados. Quito - Ecuador - Suramérica